Hay personas que acaban teniendo deudas muy importantes sin ser culpables de las mismas. Es el caso de aquellos que, casados en régimen de gananciales, acaban asumiendo la mitad de la deuda de sus cónyuges tras la separación. Deudas que, en muchos casos, no sabían ni que existían. 

En otros casos, la persona es responsable de las deudas, pero no por mala praxis, sino porque las cosas no siempre salen como uno espera. Por ejemplo, una persona que monta un negocio que, pese a trabajarlo y tratar de sacarlo adelante, no acaba de salir y genera deudas. 

Una enfermedad también puede ser causa de que se generen deudas al no poder trabajar y, por tanto, afrontar pagos que se tenían contraídos o los que se van generando todos los meses, como luz, agua etc.

A veces, las cosas se tuercen de tal manera que, aunque la persona pueda trabajar y ganar un sueldo, no puede salir adelante por el enorme peso de la deuda que tiene detrás. Una empresa puede decretar una suspensión de pagos y ahora, también puede hacerlo un particular. Pero puede ir más allá y solicitar que toda o parte de esta deuda sea perdonada mediante la Ley de la Segunda Oportunidad.

Cada caso es diferente y hay que estudiarlo por separado. Por eso, si te encuentras en la situación de que tus deudas no te permiten remontar tu vida, lo mejor es hablar con un Abogado ley de la segunda oportunidad en Vigo y estudiar de forma individualizada lo que se puede hacer en tus circunstancias. El abogado te va a indicar los pasos que tienes que dar y cómo tienes que realizar las solicitudes. 

Aunque depende del juzgado, los casos más sencillos suelen resolverse en plazos muy cortos, entre tres y seis meses y solo los que tienen complicación y en los que hay que demostrar, por ejemplo, que no ha habido negligencia o que las deudas no se han contraído por una mala acción, los plazos pueden alargarse más.

Una vez que salga la sentencia se sabrá el porcentaje de deuda que se condona, muchas veces el 100% y siempre suficiente para que la persona pueda comenzar de nuevo su vida. Una manera de poder reconducir una situación que parecía no tener salida, pero que en realidad la tiene y a la cual tiene acceso mucha más gente de la que cree.

por lola